Y no te asustes si me río como una loca. ▲

Una sin corazón en el reino de los corazones.

“Una sin corazón, buscando el reino de los corazones, un lugar que no existe. Un corazón recluso, atrapado, que quiere salir fuera. ( Mis sentimientos ¿Qué son de ellos? No lo se. ) Pensé y pienso en un mañana, en un ayer. No sé si podré ya querer como antes, hace tiempo que mi corazón no late, se muere lentamente aunque no quiera. Quiero ir a un lugar donde nada me hiera, quisiera alejar ya todo el dolor, dejar las cargas. Veo todo de otro color, algo más gris o más oscuro, disimular las lágrimas es duro, cruda es la realidad que percibimos y nos escondemos lejos de la que vivimos. ( Mantengo prisionero al sufrimiento, miento, digo que vivo el momento. ) Lo siento por querer abandonar, quiero desaparecer, irme a otro lugar. Sigo arrastrando mis penas y alegrías, luz y oscuridad, mis días. Quizás sigo asiendo aquella cría distinta a las otras, lo noto, mi corazón está roto. Olvidé mi pasado para hacer un futuro sin ti, por duro que fuese, quiero ser esa que era antes de morir. Quiero un lugar en el que no vuelva a sufrir, resurgir de mis cenizas, estoy muerta por dentro de soportar tantas palizas. Las caricias se desvanecieron con lágrimas que en este cuento se perdieron. Soy una sin sombra, soy una sin corazón, sigo en busca de un porqué, de una razón de mi existencia. Engañan las apariencias, en poco tiempo muchas malas experiencias, demasiadas para mi gusto. La vida te da sustos y no es justo, la oportunidad se agota, noto una fuerte presión ¿Será lo último que sentirá mi corazón? Lejos de todo y todos quiero irme, gritar alto y que nadie pueda oírme. Palabras para ti vacías que me hacen eco, y se repiten en mi corazón, sigue hueco.”