“Le he robado la cartera a la tristeza, he pasado tardes muertas con mis culpas, he tomado drogas pasando noches enteras fuera de mi cuerpo, he bebido los licores de la más absoluta felicidad y también me han aplastado los miedos de la infancia. He querido y he odiado, fui capaz de saltar las tapias del rencor, he pedido perdón, he hecho cosas irreparables, he mentido por un beso y he dicho la verdad aún sabiendo que así lo perdería todo. He tanteado con mi mano el camino de tu espalda encontrando el tiempo perdido. He visto llorar a mi madre, he subido a trenes sin destino, vi como Argentina ganaba el mundial con mis amigos, he hecho muchísimas cosas por muchas personas, he ocultado mis defectos, he visto a la pobreza pasearse por las aceras, hice un mundo a tu medida, me conozco de memoria tus cosquillas. Me convertido en una máquina insensible, me he cerrado al amor. Me han engañado, he sido fiel y he dado hasta vaciarme. He firmado 900 despedidas, he probado la anestesia, he sido cobarde y valiente como quien viaja de Groenlandia hasta la Antártica , he pensado que no valía para escribir. De pequeña vi a Beckham desde el autobús y también a Bardem a través del cristal de un hotel. He escuchado a los árboles, me he hecho la dormida y he probado la gloria tras darlo todo por perdido. Me he gastado mucho dinero en cosas innecesarias, me han roto el corazón de todos los modos posibles y también he hecho mucho daño. Me he perdido en Rosario, he viajado en colectivos y a dedo. He hecho caso a mi cabeza y a mi corazón, pero lo más importante: He aprendido de mis errores.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si queres, dejá un comentario y contame que te pareció la entrada. ▲